La alegría del batallón
La alegría del batallón, Cuento militar en un acto y cuatro cuadros se estrenó en el Teatro Apolo de Madrid, el día 11 de Marzo de 1909. Sus libretistas, Carlos Arniches y Félix Quintana. Música de José Serrano.
La acción se desarrolla en un pueblo del Maestrazgo -comarca entre Castellón y Teruel-, durante la Guerra de los Siete Años (1833-1840), segunda guerra civil carlista.
Acto I
Un grupo de milicianos se aleja en la casa de la familia del campesino Tofol; Quiqueta, hija mayor del Tofol, descubre al soldado gitano Rafael Montoya escondiendo algo en el suelo, y cuando lo relata en casa, el soldado Cascales -apodado "La Alegría del Batallón"- les confiesa que Rafael es un pobre gitano de Granada que muere de amor por la gitana Dolores, y que es como un hermano para él porque le ha salvado la vida. En medio de la noche, llama a la puerta de la casa el Sargento, que revela a los soldados cómo la tarde anterior un soldado visitó el camarín de la Virgen del Monasterio de Lucena con el fin de cumplir una promesa; tras la visita, los frailes comprobaron que faltaba la cadena y cruz de brillantes que pendía del cuello de la imagen. El fraile que acompaña al Sargento reconoce a Rafael Montoya como el soldado que ha estado en el camarín, siendo encarcelado para ser sometido a consejo de guerra sumarísimo. Tras la llegada de los gitanos, entre los que está Dolores con el hijo de ambos, en el tercer cuadro se celebra el juicio contra Rafael que, gracias a la agudeza de Cascales, que afirma que fue la mismísima Virgen quien le ofreció a Rafael sus joyas para que pudiera regresar con su novia y cumplir con ella, el gitano es absuelto de su delito concluyendo la obra felizmente.
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